cinco razones para tener un buen día

Si hay algo que tengo en común con Nick Hornby (aparte de que los dos amamos a Rufus Wainwright) es mi obsesión por las listas. Parece mentira, con lo que me gustan, que no haya metido todavía ninguna! Así que para remediarlo, y teniendo en cuenta cómo están los ánimos (y cómo tienen pinta de ir a estar hasta mediados de febrero), aquí tenéis mi top 5 de canciones que siempre me alegran el día:

1. Sitting on the dock of the bay, de Otis Redding
2. Twist and Shout, de los Beatles (podría meter su discografía completa en esta lista, son el antidepresivo perfecto!)
3. Love minus Zero - No limits, de Bob Dylan
4. The only living boy in New York, de Simon & Garfunkel
5. Two thousand places, de The Polyphonic Spree

(Como siempre, según estoy haciendo la lista me siento fatal por no haber metido otras cosas, como Papa don't preach o I´m afraid of americans... pero no pueden ser todas!).

Hoy es mi cumpleaños! 21, no está nada mal. Por un año, en vez de neurotizarme, que es lo que hago desde que me descubrí tres canas el día que cumplí los 18, estoy teniendo un buen día. Soy feliz porque los niños me han hecho un montón de dibujos (qué fácil es comprar el amor con un par de gominolas) y además han comido de maravilla. El problema es que al pagar en la tienda de chuches me he dejado la tarjeta (ya lo sé, no os extraña, soy un desastre!) y ahora me la han bloqueado y no puedo sacar dinero hasta mañana. Cómo voy a invitar esta noche a algo a todo el mundo? Snif.

(Aix, me acaba de dar un ataque de mala conciencia del plan "deberías-estar-estudiando". Me voy antes de que la culpabilidad me estropee el día!)